En 1897, en
Inglaterra, una actriz inglesa llamada Dame Nellie Melba tenía problemas de
sobrepeso y debía adelgazar para una obra, ella vivía en el hotel Savoy de
Londres (en la cocina del famoso Hotel estaba el Chef Escoffier), y en una
ocasión al cocinero se le quemaron las tostadas que estaban muy finas para que
Melba consumiera menos calorías. Antes
de que César Ritz, el dueño del hotel le pidiera disculpas por lo sucedido,
ella le dijo que felicitaba al Chef pues le encantaban las nuevas tostadas
crujientes que le preparó.
En ese instante,
Ritz le dijo que las bautizarían como Melba en su honor, o tostadas Melba. Lo
que hizo Ritz le sacó provecho y renombre a esa equivocación.
Lo que comenzó
como un error de un cocinero, se convirtió en algo que sería famoso en todo el
mundo, bajo el nombre de la famosa y querida actriz Melba.
No todos los
errores terminan de esta manera, pero muchos pueden ser aprovechados para
nuevas oportunidades de vida.
Lic. Brigitt de
Sánchez
CNP 16616
@palabrasmagicasdelaradio