viernes, 22 de agosto de 2008

LAS PALABRAS MÁGICAS





Cuando era una niña, mi papá solía replicarme que siempre usara las palabras mágicas. A mi entender, al principio creí que las usaría y tendría poderes como los magos, y efectivamente ese era el verdadero poder de esas palabras como: GRACIAS, POR FAVOR Y SALUDAR A TODA PERSONA QUE ME ENCONTRARA EN MI CAMINO.

Hoy en día, recuerdo cada vez más sus sabias enseñanzas. Esas palabras me han abierto puertas y ventanas cada vez que he querido, así como también han ayudado a otras personas que en algún momento han necesitado de ellas y han llegado a mí de la misma forma que las uso.

En este mundo tan difícil y lleno de presiones podemos caer en el descuido de no usarlas. Se ha comprobado que los individuos agradecidos son más felices en un 25%, en estudio arrojado por el Dr. Robert Emmons, de la Universidad de California en Davis, en los Estados Unidos. También esas personas son más alegres, tienen un mayor grado de optimismo, determinación, trayendo como consecuencia menores niveles de depresión y estrés; además se sienten más queridas y están mejor preparadas para amar.

Lo hermoso, es comenzar desde ahora mismo a practicar estas rutinas que a diario podemos proporcionar alegría y paz a las personas que las escuchen, a su vez enseñamos a los que no se atreven a enfrentar ese nuevo reto, y no mostrarse ante las personas como unos MALEDUCADOS y GROSEROS.

Gracias Papá, por enseñarme esas palabras y ¿sabes? lo mágico es saber usarlas, para que la MAGIA llegue a nosotros.

Brigitt

viernes, 15 de agosto de 2008

LLEGÓ LA PRIMAVERA






EL MES DE MAYO ES PROPICIO PARA HACER INVENTARIOS, ES EL MES DE LA PRIMAVERA, DEL FLORECIMIENTO DE LOS JARDINES Y LA NATURALEZA ES CÓMPLICE PARA REALIZAR ESA TAREA.

A VECES NOS PREGUNTAMOS, QUE LABORES HEMOS DEJADO DE HACER O DISFRUTAR, ¡TANTAS COSAS NO CONCLUÍDAS, ILUSIONES PERDIDAS Y OPORTUNIDADES PASADAS!

QUIZÁS LO MÁS TRISTE SEA, EL NO HACER LO QUE NUESTRO CORAZÓN NOS DICTE: EL DE SEGUIR ADELANTE Y TENER EL ÁNIMO SUFICIENTE PARA VENCER LOS OBSTÁCULOS Y TRISTEZAS QUE SE INTERPONGAN.

NO DEJEMOS QUE EL NEGATIVISMO NOS INVADA, LA VIDA LA VIDA SE ENCARGA DE MOSTRARNOS LA BELLEZA PARA SEGUIR ADELANTE Y DEMOSTRAR LAS VIRTUDES Y CUALIDADES QUE POSEEMOS.

¡ADIÓS TRISTEZA! PORQUE RECUERDA QUE LA MAYOR PARTE DE TU VIDA ESTÉ OCURRIENDO AHORA, LIMPIA ESE CRISTAL A TRAVÉS DEL CUAL OBSERVAS E INTERPRETAS LA VIDA, Y TOMA LO MEJOR DE ELLA CONVIRTIÉNDO LO NEGATIVO EN POSITIVO.


LIC. BRIGITT DE SÁNCHEZ.

jueves, 14 de agosto de 2008

MI COMPAÑERO (a) DE TRABAJO ME CAE MAL




Muchas veces al llegar a una empresa, nos encontramos rodeados de personas que cumplen con su trabajo, y que también toleran la convivencia humana.

Se ha comentado mucho sobre este tema pero todavía queda mucha tela que cortar. Los compañeros (as) de trabajo son la otra familia que encontramos en nuestro transitar, y es imposible que no se llegue a compartir un saludo, un abrazo o hasta un gesto cariñoso, y también el consabido ¡hola compadre!

También es muy triste y lamentable llegar al trabajo, y seas observado como un extraterrestre, no ser tratado con cariño, educación o simpatía, porque simplemente has ganado ese trato por tu propia culpa.

Es difícil la convivencia y el trato entre compañeros, ya que la base de esto es el respeto, pero ¿Qué sucede cuando somos nosotros mismos los culpables?-claro por creernos superiores, orgullosos, antipáticos en nuestro sociabilidad cotidiana.

Si analizamos desde varios puntos de vista, esta actitud influye negativamente en muchos aspectos de nuestra vida como:
El desempeño en el trabajo no es óptimo por el ánimo de los compañeros.
La convivencia se hace imposible.
Las buenas relaciones laborales quedan nulas, porque el compañero “problema” me cae “gordo” como dicen los argentinos, y no le hablo.

¡Basta ya! Merecemos trabajar en un lugar donde se respire paz, armonía y el compañerismo prevalezca. Enséñale a ese compañero (a) que debe vivir en sano crecimiento. Ofrécele un gran abrazo y sonrisa, y si esto no funciona, acude a los jefes superiores, porque nadie merece trabajar con personas que desean es hacer sentir mal a los compañeros, y al final el único perdedor es él necesitando urgentemente ayuda profesional.

Lic. Brigitt de Sánchez

sábado, 9 de agosto de 2008

¡DESCONÉCTATE!





Una de estas noches, tuvimos la agradable visita de unos compadres, a quienes no veíamos hacía algún tiempo.
Estuvimos conversando de algunos temas, pero coincidimos en uno que de alguna u otra forma nos ha afectado, y es el abuso del manejo de la tecnología.

Nos preguntaríamos ¿qué debemos hacer al respecto?
Todos o casi todos hemos sido víctimas de este abuso, por ejemplo:
Cuando manejamos y nos llaman para darnos algún dato que debemos anotar.
¡Imagínense! Nos faltaría otra mano.

Usar el celular haciendo las llamadas, y convertir este acto en una costumbre o compromiso.
Hacer uso del celular en Horas del trabajo, causando atraso del mismo o no atendiendo a un cliente.

El celular debe ser considerado como un artículo de necesidad, y no de un intruso en nuestras vidas

Lo mismo sucede con la Internet, hay que cumplir con ciertas reglas al enviar mensajes masivos y no pretender que la persona que los reciba tenga que responder. Somos libres de agradecer, de responder, y hasta de no decir nada. Muchas personas usan un mensaje instantáneo de respuesta para todo el mundo, y con ello quedan bien, pero aquellos que no lo usamos (y me incluyo), los recibimos ¡y ya! Corremos el riesgo de “las exigencias internaúticas”.

Agradezco los mensajes que recibo, pero respeto a quienes debo enviarlo, y que hacer en su momento pertinente.

La tecnología cada día se expande más, pero debemos evitar ser esclavos o sumisos ante ella, y de vez en cuando, hay que ¡desconectarse! Por nuestra salud mental y convivencia en general.


Lic. Brigitt de Sánchez.